Saturday, January 31, 2009

Como estudiar Aperturas 2

Desde el diván del Entrenador No. 2

(A la memoria de la Maestra Amparo Vargas Arreola 1926-2001)

IM Raúl Ocampo Vargas

¿Cómo estudiar la Apertura? Parte II

El Gambito Blackbourne, y un “Patakin”.

Una actitud común entre jugadores jóvenes es el de estudiar líneas poco conocidas a gran profundidad para sorprender a sus contrincantes y obtener algunas victorias rápidas o al menos una ventaja en la apertura con la que trabajar el medio juego. El éxito frecuente de esta “estrategia” tiene el peligro de que el jugador que la utiliza recurra cada vez más a este estudio de aperturas y su estilo se vaya afectando y se vuelva especulativo. Si además tiene pocas oportunidades de enfrentar una oposición fuerte, conforme vaya ascendiendo en el “Elo” y obtenga el derecho de combatir contra jugadores asentados llegará a un punto donde parece que se estanca, cuando más bien lo que sucede es que no se preparó con vistas al futuro de su desarrollo. Entonces se descorazona y si no cuenta con el apoyo de un entrenador o simplemente de un amigo objetivo no encuentra que pasa con su juego. Buscará en otras razones el abandono del “éxito” y quizás pase por alto que obtuvo ascensos más gracias a los triunfos relativos a su “sorpresivo” repertorio que a un real mejoramiento de su nivel de juego.

Seguramente muchas veces habrá leído en comentarios a partidas magistrales que un gran maestro sorprendió a otro con una variante extraña y que por ello obtuvo un fácil éxito y quiso imitar esta idea.

El problema es mucho más complejo de lo que parece. Permítanme analizarlo desde tres personajes juveniles en que observe varias situaciones.

Un jugador, digamos “A” obtiene muchos triunfos en un torneo round robin válido para el rating de la FIDE pero en que enfrentó a unos tres jugadores medianos y a otros francamente muy poco experimentados. En prácticamente cada partida obtuvo ventajas de apertura con líneas poco conocidas pero que él estudio muy bien. Surgieron en sus contrincantes errores gruesos, causados por la inexperiencia y por no saber enfrentarse a una “variante sorpresa”. Las partidas no fueron buenas, pero le dieron éxitos relativos y aumentó unos 100 puntos de Elo.

Otro jugador, digamos “B” partió a la Isla de Cuba a jugar varios torneos también válidos para el rating FIDE, pero en los que encontró jugadores muy fuertes, a menudo más fuertes de lo que el “Elo” que tenían indicaban. Sus resultados fueron buenos, sus partidas realmente interesantes y cada punto requirió de un esfuerzo concentrado. No utilizo “variantes sorpresa”, lo que fue mejor, ya que contra la fuerte oposición que enfrentaba hubiese sido una táctica que se le hubiese revertido. Después de dos torneos, prácticamente no ganó un punto de “Elo”, pero en cambio esta experiencia seguramente redundará en un buen desarrollo en su futuro.

Por otro lado, un tercer jugador, digamos “C”, no busca jugar en torneos para mejorar “Elo” sino simplemente compite en torneos abiertos estilo suizo, donde de 5 partidas enfrentará a dos maestros a lo sumo. Se prepara bien para los enfrentamientos con esos maestros, estudia algunas líneas para sorprenderlos. Con los jugadores débiles utiliza un estilo muy especulativo y a veces gana muchas partidas contra ellos, las más de las veces explotando errores tácticos. Su desarrollo ha tenido muchos altibajos a pesar de su gran talento natural.

Los tres jugadores mencionados son jóvenes con gran talento y enorme afición por el ajedrez, por lo que podría esperarse un futuro brillante. Los tres tienen un talento en nada inferior al que poseían jugadores mexicanos que llegaron a ser Grandes Maestros Internacionales, pero al tomar rutas diferentes, uno se podría preguntar si los tres llegarán a alcanzar el máximo título.

De los tres, seguramente “A” tendrá pronto el mayor rating, pero corre el peligro de que en un futuro cercano llegue a la situación de que aparentemente se “estanque” y no sepa el porqué.

El jugador “B” desde hace unos dos años se denota que posee la fuerza de un fuerte maestro, pero esto no se refleja en su “Elo”. Sin embargo, se ve un desarrollo creciente en su juego. Una de las partidas en las que logró el triunfo en Cuba, podría firmarla, sin pena, cualquier Gran Maestro. El peligro es que a veces alterna torneos de fuerte oposición con torneos fáciles. Aunque eso es culpa del sistema deportivo del país, donde hay demasiados torneos juveniles con oposición muy dispareja y tiene que jugarlos para obtener el apoyo gubernamental y no existe un buen programa de competencias en que la finalidad sea la superación técnica, sino simplemente lo que se valora es el resultado deportivo sin análisis. Incluso, si sólo se ven sus resultados desde el punto de vista cuantitativo, se podría decir que su “gira” por Cuba, no fue lo fructífera que se esperaba. Algunos “técnicos” ya se han expresado en ese sentido. Craso error causado por ver solo los resultados del “Elo” y no examinar con cuidado las partidas, y por supuesto, los contrincantes. Ojalá que los que estén cerca de él sean objetivos y lo ayuden a sacar el jugo verdadero de lo que yo pienso fue una fructífera experiencia.

La experiencia de “A” en cambio, es la más peligrosa y la más letal. Puede darle una idea errónea de su verdadero nivel y en lugar de ayudarlo a que se estimule su trabajo lo mal direccione. Si no varia su “táctica” en cuanto repertorio, perderá tiempo muy valioso en su desarrollo.

El jugador “C” es el que más intriga su futuro. Su estilo es interesante, pero cada vez más recurre al fácil camino de la “celada” de apertura, y aunque le da triunfos ocasionales, incluso contra jugadores muy fuertes, sus resultados, si se les graficara denotarían un “hombre montaña” con altos picos y grandes abismos.

Aunque hay que confesar que cuando uno enfrenta a los tres jugadores, “C” es el que más interesante oposición presenta. Obliga a esforzarse en “desenmarañar” las celadas ingeniosas que plantea, y que su repertorio estimula a estudiar viejas líneas. Pero también hace que uno se pregunte: “¿Cuándo despegará?” ¿Será que ese gran talento no tendrá más desarrollo que efímeros triunfos en uno que otro torneo suizo? Siempre se le ve analizando las partidas pero desde un punto de vista que me parece equivocado. Trata de ver el error coyuntural a mediados de la partida y no se plantea si su repertorio de aperturas es la causa de muchas de sus derrotas, contra fuerte oposición, y que de vez en vez “derrapa” contra jugadores muy inferiores a él en talento, experiencia y estudios.

Creo que los tres estudian mucho, pero los de “B” son los que parecen siguen un plan, al menos cuando no compite con sus coetáneos, que le ofrecen desigual oposición.

Aunque tengo que aclarar que “C” es de más edad que “B” y que “A” y que hace un par de años logró éxitos muy importantes, pero que sus resultados van más a la baja que a la alta, siempre “hombre montaña”.

En dos torneos “activos” de treinta minutos por jugador, “C” me planteó el siguiente interesante gambito que pudiera llamarse “Blackbourne”, por ser utilizado por el Gran Maestro inglés en los siglos XIX y XX; que surge tras:

1.e4 e5 2.Cf3 d6 3.d4 Ag4?! 4.dxe5 Cd7!

Muchos fuertes jugadores lo utilizaron desde finales del siglo XIX y no se puede decir que esté refutado.

Tras 5.exd6 Axd6; el negro ha logrado un buen desarrollo a cambio de su peón y ante el blanco se presenta una tarea nada fácil para consolidar su ventaja material.

Es un gambito olvidado que en partidas rápidas puede brindar éxitos contra casi cualquier oposición. Sobre todo si el jugador con las blancas es ambicioso y quiere jugar activo a toda costa.

Existe poca teoría al respecto y como es una línea que uno poco espera enfrentar, tiene a su favor el elemento sorpresa. Aunque querer sorprender dos veces al mismo contrincante no parece práctico, no se puede decir que sea mala elección si uno piensa que en las líneas “normales” será superado por el contrincante.

Sobre la manera de enfrentarse al gambito, me permitiría referir al lector al archivo que se desarrolla en Inforchess Magazine donde examino el planteo con cierta profundidad y con material que no es accesible, hasta ahora, en idioma castellano.

En general, los grandes maestros piensan que la clave es un “timing” (oportunidad) en jugar Cd4 con blancas y buscar el cambio del alfil negro en g4, antes de enrocarse corto. Otros piensan que simplemente hay que jugar un h3 y g4 en momento adecuado y aliviar la presión sobre el peón e4 blanco.

Pero esto es solo coyuntural y específico a la línea. Lo que interesa es si este tipo de Gambito pueda tener la solidez de otros gambitos similares como el Benko. Pienso que si, que es una opción viable, a ser usada muy de vez en cuando. Pero que no se haga costumbre.

Hay gambitos o líneas similares que dan muchos puntos en torneos rápidos.

Por ejemplo: 1.e4 e5 2.Cf3 Cf6 3.Cxe4 d6 4.Cxf7!?. Esta línea la utilicé unas 10 veces en partidas a treinta minutos y obtuve el 100% de los puntos. Incluso el llorado Vitolinsh la utilizó a menudo en torneos serios con éxito promedio.

Cuando la use, lo hice para “forzarme” a complicar mi juego en una etapa en que mi objetivo era quitarle un poco de aridez a un estilo que tendía a ser muy posicional y que deseaba erradicar; pero no lo utilice para ganar puntos, sino como un plan de preparación.

Para objetivos similares, como preparación para “enriquecer” el estilo de juego, yo creo que si es válido hacer uso de estos “gambitos desbalanceadores”.

El uso del repertorio como una forma de ganar experiencia en posiciones complicadas es un recurso muy utilizado por los entrenadores experimentados, pero introducir estos gambitos como “modus vivendi” puede ser muy dañino en los jugadores jóvenes.

He observado muchos jugadores que como “A” en cada partida, de cada torneo, utilizan líneas especulativas, desechando los caminos probados que siguen los grandes maestros. Esta manera “irregular” de jugar las aperturas tienen un costo excesivo en el futuro. Cuando se dan cuenta de la necesidad de tener un repertorio “formal”, a menudo ya es demasiado tarde para ellos. Requieren como “empezar de nuevo”. Si tienen la suficiente presencia de ánimo y se les estimula bien, puede ser incluso muy favorable para su juego en general, el volver a andar todo el proceso y pueden, finalmente, llegar a desarrollarse más que un jugador tipo “B”. Pero el esfuerzo requerido es tan grande y por lo general lo acometen a edad tan madura, que la dificultad de la tarea los derrota y quedan como en un “nirvana”, perdidos entre las nebulosas de las variantes e ideas en las aperturas. Por lo general, regresan a las andadas y su desarrollo se ve limitado para siempre.

En el estudio de las aperturas, es tan importante el escoger bien el repertorio para cada etapa de desarrollo como elegir los torneos.

Esa era una clave del ajedrez soviético: torneos gradualmente más difíciles, bien elegidos y un repertorio adecuado a cada nivel de desarrollo.

“Hay que saber nadar y guardar la ropa".

A continuación una partida tipica modelo en la epoca romántica del ajedrez con breves comentarios:

1) Paulsen,V - Mieses [C41]
Alemania, DSB-07 Kongress. 1892

1.e4 e5 2.Cf3 d6 3.d4 Ag4?! [3...f5?! Otro gambito en la Defensa Philidor que usó el GM Jonathan Mestel en sus años mozos.] 4.dxe5 Cd7!

La mejor jugada en la posición dada.5.exd6 Axd6 6.Ae2 De7 7.Cc3 0-0-0 8.0-0 Cc5 9.Cg5 Axh2+ 10.Rxh2 Txd1 11.Axg4+ Td7 12.Cd5 De8 13.Axd7+ Cxd7 14.Af4 f6 15.Cxc7 Dh5+ 16.Ch3 g5 17.g4 Dxg4 18.Ag3 Ce5 19.Cb5 Dd7 20.a4 Ch6 21.Cxg5 Chg4+ 22.Rg1 fxg5 23.f3 Td8 24.Rh1 Ce3 25.Tf2 Dh3+ 26.Ah2 a6 27.Cc3 Cxf3 28.Cd5 Txd5 29.exd5 Cg4 se rinde el blanco. 0-1. 0-1

Lagos, a 10 de marzo de 2005.

IM Raúl Ocampo

Como estudiar aperturas 1

Desde el Diván del Entrenador nº 1
Por el MI Raúl Ocampo Vargas

(A la memoria de la Maestra Amparo Vargas Arreola 1926-2001)

Cómo Estudiar las Aperturas

Fue la pregunta más frecuente recibida en trainerchess@yahoo.com a mi convocatoria de consultas, por lo que decidí dedicar el primer artículo de esta serie a ese tema.

Cuando uno examina los libros de aperturas nota una gran cantidad de variantes y una serie de evaluaciones de las posiciones cuando terminan las citadas variantes, muchas veces sin una sola palabra. Se supone que se ponen las variantes más relevantes y a veces se pregunta si uno debe tratar de memorizar tales series de jugadas o tomarlas simplemente como ejemplos del tipo de juego que puede desarrollarse. Por lo general hay pocas palabras que indiquen que es lo que está tratando de hacer cada bando. Si uno se basara en lo que aparece en los libros para estimar que es lo importante que hay que estudiar, llegaría uno a la tal vez errónea conclusión que hay que estudiar variantes y no ideas.

Pero ya que Einstein decía que el correcto planteamiento de un problema era a menudo más importante que su solución, trataré de identificar primero las cuestiones a dilucidar y luego sus posibles soluciones.

El estudio de la apertura lo constituyen las siguientes partes y tareas:

  1. Elección del aspecto de la apertura o que aperturas, defensas o sistemas que van a ser nuestro objeto de estudio.

  2. Antecedentes.

  3. Conceptos.

  4. Recopilación de material.

  5. Elección de material relevante.

  6. Análisis de casos.

  7. Modelos exitosos.

Y tal estudio requiere una metodología para:

  • Determinar la información relevante.

  • Identificar que conocimientos y habilidades (competencias) se debe intentar adquirir.

  • Establecer la manera más efectiva de adquirir dichas competencias.

El estudio de la apertura puede ser individual o en grupo, puede ser planificado por el estudiante mismo o con la asesoría o dirección de un especialista. En ambos casos la planificación puede ser total o en partes, es decir, un especialista nos puede dirigir en algunas de las partes o tareas, o en la planificación completa del estudio.

Como en toda planificación dependerá de la misión que se habrá uno impuesto y de la visión del futuro a que uno quiera llegar. Esta visión dependerá de nuestros antecedentes personales, de nuestra “historia” de vida y de los recursos actuales o potenciales con que contemos.

Sin un planteamiento completo del problema, a mi manera de ver, no se puede abordar de una forma efectiva, el estudio de la apertura.

Tenemos que tomar en cuenta una serie de informaciones que nos aporta la experiencia de muchos entrenadores que se enfrentaron anteriormente al mismo problema.

Recordemos una máxima de la escuela soviética: “Es importante saber que es lo que se tiene que saber de acuerdo a la etapa del desarrollo técnico ajedrecista en que estemos”. Es decir, lo que pretendamos aprender de la apertura debe estar relacionado con el nivel de conocimientos de las otras fases de la partida del ajedrez, lo que significa que el nivel de estudio de la apertura debe corresponder al nivel de estudio del medio juego y al nivel de estudio del final.

Por supuesto que, a su vez, el nivel del sistema de estudio de ajedrez estará relacionado con el nivel de desarrollo de cultura, conocimientos y habilidades que tengamos en general; es decir de nuestra etapa de conocimientos y comprensión de ellos de nuestra personalidad integral.

Por ello Botvinnik remarcaba la importancia de que un ajedrecista fuese culto y fuese apoyado por entrenadores cultos, ya que esto tenía relación directa con el nivel de cultura ajedrecística que pudiera adquirir.

Por supuesto que estas son reglas generales, para las personas comunes. La historia nos muestra algunos casos, no tan numerosos como muchos creen, de personas que con talento especial y circunstancias también especiales, se salen de la regla y adquieren una gran destreza en el ajedrez sin tener un desarrollo de nivel semejante en otros aspectos de la cultura general o de su desarrollo como personas.

Habría que adentrarse en cuestiones muy profundas de la personalidad para analizar como ajedrecistas de menos de quince años alcanzan un grado de destreza y de excelencia en ajedrez que no tienen ninguna correspondencia con otros aspectos de su desarrollo como personas.

Está demostrado que, con técnicas especiales, con especialistas de alto nivel y con un “arreglo” de circunstancias ad hoc; unido todo ello a un talento excepcional identificado oportunamente, con una motivación específica estimulada en grado superlativo y de manera científica y sistemáticamente orientada, se pueden “fabricar” grandes maestros de ajedrez con menos de 18 años de edad y menos de 10 años de experiencia en estudio y torneos de ajedrez.

Claro que todo eso implica una organización, un gran esfuerzo económico, grupos de trabajo bien dirigidos y correr un riesgo de afectación dramática a los niños a los que se les exponga a tales métodos de aprendizaje acelerado que, hasta donde sabemos, están en proceso de experimentación y aún no tienen suficiente experiencia probatoria que permita manejarlos con una seguridad satisfactoria.

Es probable que haya alguna contraindicación, y que esos niños “super grandes maestros” tengan algunos problemas de personalidad o de desarrollo emocional de difícil pronóstico en el estado actual del arte de la enseñanza del ajedrez.

Pero los planteamientos de Botvinnik estaban dirigidos al ajedrecista común. De acuerdo a la ideología humanista de la época en que se desarrolló Botvinnik, entre 1925 y 1945, en la Unión Soviética se le daba mucha importancia al desarrollo de métodos que ayudaran a la superación del individuo común, no al de los seres excepcionalmente talentosos. De hecho uno de los éxitos que podemos conceder con seguridad al sistema educativo soviético fue su gran avance en investigar, analizar y desarrollar métodos para que individuos con ciertos problemas de conducta, de adaptación social o con deficiencias físicas o con desarrollo físico afectado, causado por las grandes hambrunas de la post revolución rusa; pudieran desarrollarse a niveles aún superiores a los que seres “normales”, sin ninguna dificultad especial , lo hicieron en otras sociedades. Pilares del sistema educativo soviético como Lev S. Vigotsky, “redescubierto” cuarenta años después de su muerte, son reconocidos como los estudiosos más avanzados en el campo de la psicología educativa actualmente. La influencia de un pensador como Vigotsky en el desarrollo cultural de la Unión Soviética y en consecuencia con el ajedrez soviético, es muy difícil de exagerar, pues fue de gran magnitud. Sin los trabajos de Romanovsky, Levenfish, Botvinnik, Kotov, Ragozin y sus contemporáneos, no se podría explicar uno el alto grado de desarrollo de la escuela soviética de ajedrez de 1925 a 1990 y mucho menos el nivel de las actuales escuelas de Ucrania, Rusia y de otras exrepúblicas soviéticas; sin hablar de los ex-soviéticos que lideran en escuelas de otra veintena de países como Alemania, España, Estados Unidos, etc…

Claro que cuando “aterrizamos” el problema a las circunstancias de un ajedrecista iberoamericano, que no cuenta con una organización, con recursos muy limitados, sin guía de un especialista, con acceso limitado a la educación, generalmente mal formado en métodos de estudio, con problemas psicológicos acordes a sociedades llenas de incongruencias, con deficiencias alimentarias que han lastimado su desarrollo físico y mental; con literatura ajedrecística escasa a su alcance, rodeado de influencias negativas tanto para la conducta como para su desarrollo como ajedrecista; la tarea “nos la ponen en Vietnam”, como diría un viejo entrenador de la academia de ajedrez de Centro Habana.

Sus métodos de estudio, si se llegasen a desenvolver lo suficiente como para decir que existen, serán aleatorios y producto de su buena o mala fortuna.

Mi recomendación es que traten de llevar a cabo las tareas enunciadas al grado de su capacidad y circunstancias.

Así como hay manuales para “el arquitecto descalzo” es decir, manuales de construcción para los que tienen recursos limitados en material y sobre todo en capacitación y asesoría; a mi me gustaría alguna vez escribir un manual de ajedrez para el “ajedrecista descalzo”.

Ya que mi tribuna es la red de Internet, debo dar por hecho que mis lectores al menos pueden acceder a la información de ajedrez accesible por dicha red. A mi compañero ajedrecista “descalzo” le puedo recomendar varias cosas. Comencemos por las tareas enunciadas:

Primero que nada, para poder elegir su objeto de estudio, deberá establecer su Misión y Visión.

Como supongo no cuenta con especialistas para ello, no tiene un psicólogo de cabecera, o un entrenador personal con especialidad en ajedrez y planeación estratégica personal, sino cuenta con él mismo y le hace falta inclusive un buen amigo crítico y con buen desarrollo humano; que es lo más valioso para un buen ajedrecista, le sugiero primero que se conozca bien a si mismo.

Conocerse a si mismo es lo más importante para un ajedrecista y a la vez lo más difícil. Lo advierto, pero no con ánimo de hacerlo consciente de una situación desesperada, sino con la idea de que emprenda la tarea con seriedad. “Suave, para que se te dé”, como diría aquel viejo entrenador de Centro Habana, Alejandro Meylán.

El análisis personal es para determinar cual será la visión que pueda tener de si mismo para dentro de, digamos, cinco años. Sabiendo a donde quiere llegar, podrá determinarse que ruta debe seguir y que debe hacer para ello. Y que tiene que estudiar, que conocimientos y habilidades pretende adquirir. Como consecuencia sabrá que debe estudiar en apertura, medio juego y final. Claro que para tener la visión de adonde podría llegar en cinco años, debe saber quien es y donde está ahora. Pretendiendo, dije pretendiendo, establecer quien es realmente como ajedrecista (y como persona, por supuesto).

Aquí me parece oportuno recordar un principio básico de la psicología, que fue mencionado varias veces por San Pablo. Cuando le preguntaron: ¿Cómo hacer para obtener la fe, si aún no se tiene o es débil?, San Pablo contestó más o menos así: “Actúa como si la tuvieras” Es decir, si algo se exterioriza, internamente se forma. Vigotsky decía el principio de la siguiente manera: “Para realizar algo interior, hágalo exterior”. Si usted quiere organizar su mente, organice sus ideas escribiéndolas, poniéndolas en tarjetas, organice sus proyectos, sus pensamientos y así se organizará su mente. Del interior al exterior y de ahí de nuevo a lo interior.

Cuando haga un análisis de si mismo, vaya anotando y escribiendo, haga listas, anotaciones, pregúntese a si mismo anotando sus preguntas y luego escriba sus respuestas.

Anote sus cualidades y defectos como persona y como ajedrecista. El MI Alexander Shasin, connotado teórico de la física nuclear de alto nivel y ahora uno de los grandes entrenadores rusos de ajedrez, afirmaba que analizando 15 partidas de un jugador podía conocerlo e identificar algunos defectos principales. Como mi ajedrecista descalzo no tiene experiencia de entrenador ni ha topado con cientos de ajedrecistas y analizado sus partidas, ni tiene un sistema para investigar las deficiencias de ellos; ni siquiera puede uno contar que sabe como analizar partidas; quince partidas no bastan, se requieren al menos unas 45. Vea sus últimas cuarenta y cinco partidas, dedíquele a cada una de ellas al menos una hora y haga la investigación de que clase de ajedrecista tiene ahí. ¿Cuantas partidas perdió por error táctico? ¿Porcentaje?. ¿En cuantas partidas se encontró con posiciones que no eran de su agrado? ¿Porcentaje? ¿Cuantas veces ganó con blancas? ¿Porcentaje? ¿De que nivel eran los oponentes con que perdió, ganó o empató? ¿Promedios de ranking? ¿Gana más partidas en aperturas cerradas, abiertas, semicerradas, etc? ¿Porcentajes en cada una de ellas? ¿Promedio de duración de sus partidas? ¿En que ritmo de juego le va mejor? ¿Torneos de cinco minutos, treinta, dos horas?

Usted puede hacer su propia lista de preguntas. Claro que estas serán producto de su propio nivel de conocimientos del ajedrez y de otros aspectos de su cultura ajedrecística y no ajedrecística. Claro que si contara con la ayuda de Shasin, podría tener una imagen completa de si mismo como ajedrecista, pero por lo pronto, como ajedrecista “descalzo” tendrá una evaluación “descalza” de si mismo. Pero al menos tendrá algo con que trabajar.

Después de analizarse como jugador de ajedrez, tendrá que analizarse en lo relativo a su salud, su motivación para el ajedrez, el tiempo para dedicar, y sus recursos económicos. Todo anotando cada detalle.

Luego analice sus antecedentes, cuanto ha progresado de cinco años para acá en ajedrez; establezca su tendencia y así proyecte su futuro dentro de cinco años. Anote con cuidado y con detalles muy precisos, donde cree que pudiera estar dentro de cinco años si todo va bien. Su motivación dependerá en mucho de la capacidad que tenga para su sueño. Si no puede soñar con un futuro brillante en cinco años, menos podrá hacerlo realidad. No sea mezquino con sus sueños; pero tampoco no se vaya al infinito. El mar y el cielo son igual de azules y a la distancia parece que se juntan, no intente compararse con el cielo si a usted le corresponde ser el mar, dice la canción. Y el que nace para maceta, del corredor no pasa, dice el otro refrán. Pero sueñe, si, sueñe, pero con bases. Ponerse metas demasiado grandes solo establecen las bases para amarguras futuras.

¡Suave, suavecito, para que se te dé!

Después de establecer nuestra visión, sabremos a donde queremos llegar. El siguiente paso será determinar las etapas de nuestro camino. Pero esa es otra historia, que veremos después. Por lo pronto tiene usted que cumplir 50 horas analizando sus partidas.

Una vez a Botvinnik le preguntó un joven maestro que tenía que hacer para mejorar su juego. Botvinnik le preguntó a su vez “¿Tiene una colección de sus partidas analizadas?” el joven maestro le contestó “No, no he analizado muchas de mis partidas” y Botvinnik le dijo, más o menos: “Empiece por analizarlas"”

El archivo adjunto es de algunas partidas analizadas que le ayudaran seguramente a aprender a analizar partidas, en la presente nota, le entregamos la primera de ellas, Kramnik-Ulibin 1992 mientras que el resto de partidas analizadas las entregaremos en nuestra próxima edición digital.

IM Raúl Ocampo Vargas
Ciudad de México, a 20 de Febrero del 2005

Notas bibliográficas Nº 1

Notas Bibliográficas de Inforchess No.1

How to think in Chess (Cómo pensar en ajedrez)

por el MI Raúl Ocampo Vargas.

Ante la insistencia de lectores y del editor del sitio web, inicio una nueva serie sobre libros y publicaciones de ajedrez, muy a la manera de las series “Biblioteca Digital” y “Nueva Biblioteca Digital” que comprendieron poco más de media centena de libros.

Creo en la continua renovación y la importancia de no detenerse. En numerosos sitios web aparecen en estos días muchas de las ideas vertidas en las encíclicas papales de Juan Pablo II, lo que hace patente que el ser humano falleció pero que deja una herencia viva. Su escrito con el tema de “Pensar y Creer”, en donde estimula el razonamiento crítico y su perfecta congruencia con la fe, me parece lo más inspirador e importante de su legado de puntos de vista orientador; pero lamentablemente es uno de los trabajos menos conocidos.

En muchas ocasiones lo más importante es lo menos conocido o comprendido. Pero él que tenga ojos vea.

En otro sitio web, ajeno al ajedrez, escribí un trabajo conjunto con un sacerdote de Lagos, Nigeria; sobre las afinidades de la filosofía yoruba con la católica y la total similitud de sus preceptos sobre conducta de vida. En dicho trabajo se resalta la importancia de desarrollar una mente aguda y perspicaz, que someta toda doctrina al examen racional y emocional; todo ello como firme soporte a la fe. En estos momentos de duelo para todos los seres humanos, no puede uno apartarse del sentimiento general, pero sobre todo uno debe tener vivo el espíritu de un gran hombre, manteniendo presente sus enseñanzas.

En contestaciones a los lectores comenté que una gran proporción del material que ahora estudiaba provenía de sitios web en diversos idiomas y que por ello mi actual “acopio” de información y los archivos adjuntos de mis artículos se nutrían de ello.

Ahora que reanudo este tipo de recopilaciones digitales, el siguiente problema era que libro elegir. ¿Un libro soviético de difícil adquisición? ¿Un libro que pudieran comprar los lectores? ¿O un viejo clásico?. En lo que respecta a este último tipo, creo que quedan muy pocos que no hayan sido cubiertos en las anteriores series que realice. Algunos de los archivos adjuntos que hice hace unos cuatro años aparecen actualmente en nuevos sitios web como novedades. Lo compruebo fácilmente ya que encuentro algunos errores, cosas que se me escaparon al hacer los artículos, que son difíciles de identificar por otros que no hicieron los archivos y los reproducen.

De los libros soviéticos hay algunos que quisiera presentar, pero me pareció más adecuado un libro más actual. Pero tendría que ser un tema de particular interés para mi, que justificará reanudar la serie y que dicha reanudación fuese algo especial.

Recientemente he estado trabajando en el material y contenido técnico que se requiere para las actividades de un Centro de Alto Rendimiento en la Ciudad de México. Recopile mucho material del utilizado en centros similares en la antigua Unión Soviética, la actual Rusia, los Estados Unidos, China y Alemania. Y en todas las escuelas de ajedrez, como en las demás escuelas del quehacer del desarrollo humano y su superación integral; destaca el hecho de que el primer paso es evaluar, con la máxima precisión, en donde está el alumno antes de que se inicie la orientación profesional de su desarrollo. La evaluación arroja el diagnóstico de necesidades y marca rumbo y dirección de toda acción.

Más que el cómo enseñar y el qué, más que los contenidos de las lecciones, más que la estructura técnica del entrenamiento, lo fundamental es la evaluación.

Dicha evaluación al ingreso de un Centro de Alto Rendimiento no se hace como “filtro” o una manera de ver si alguien “merece” entrar a estudiar al centro, si no se efectúa para servir mejor a los alumnos. No es examen de admisión, sino de colocación.

El como realizar tal evaluación inicial de aquel que ingresa a un Centro de Alto Rendimiento ha requerido la consulta de cientos de libros, la correspondencia con decenas de especialistas, el debate por email y telefónico con entrenadores amigos de todas latitudes y niveles. Para integrar el contenido de las lecciones bastó unas pocas decenas de consultas y una bibliografía de no más de 30 libros; pero para la evaluación precisa inicial de los alumnos, se ha requerido una biblioteca veinte veces mayor, una sumamente extensa. Pero además ha sido necesario integrar la consulta a muchos textos ajenos al ajedrez. Incluso el espléndido trabajo de Juan Pablo II de “Pensar y Creer” que define la importancia de estimular el razonamiento crítico, ha sido de gran ayuda a la tarea.

Al finalizar la tarea de diseñar un sistema de evaluación al ingreso, me siento realmente orgulloso del trabajo realizado, donde he invertido muchas horas de trabajo y he tratado de aprovechar más de treinta años de experiencia propia y cientos de años de experiencia conjunta de cuando menos 12 especialistas. Acotaciones de entrenadores como el GM Aivar Gipslis, el MI Koblentz, el MI Romanovsky, atesoradas en escritos y cassettes de grabaciones se han unido con la aportación directa de los grandes entrenadores vivos. Trabajos de psicólogos y educadores, pedagogos y conductores de talleres de capacitación, así como especialistas en la gestión del conocimiento, se han unido y tratado de coordinar con las opiniones específicas de ajedrecistas.

Entre los libros de ajedrez importantes en la tarea, está el elegido para el inicio de esta serie. En alguna forma ya lo había mencionado, pero merecía un lugar especial. Máxime que en la segunda vez que lo examino, lo he percibido muy diferente a la primera vez.

Inicio pues esta serie de Notas, con el libro “How to Think in Chess”. La labor en Polonia de Jan Przewoznik en el campo del entrenamiento ajedrecístico ha sido notable. En Iberoamérica es poco conocido y quizás fuera de la Europa Central tampoco esta bien reconocido. Polonia es por tradición un país de grandes pensadores. Al principio me llamó la atención de que durante algunos días estuve pensando en iniciar esta serie con este trabajo originario del país de donde provino el Dr. Karol Wojtyla; nuestro Juan Pablo II; en momentos cuando todo el mundo estaba pendiente de la salud del personaje más conocido de Polonia. Debo confesar, que después de Cuba, es con Polonia el país con el que tengo más afinidades. Fue una etapa de mucha influencia en mi vida mi larga estancia en Polonia hace casi treinta años. Sobre todo mi contacto fue con centros de entrenamiento y adiestramiento ajedrecístico, deportivo y militar. Curiosamente, Polonia fue quizás el país del bloque comunista que menos ha destacado en ajedrez, sobre todo si se le compara con la URSS, Hungría, Yugoslavia e incluso Checoslovaquia. Pero lo desarrollado en Polonia se ha hecho más notorio a la desaparición de dicho bloque. Grandes ajedrecistas polacos han destacado más tras la desaparición de la URSS. La cercanía histórica, étnica y cultural entre Ucrania y Polonia ha hecho que ahora las fronteras que antes las separaban sean más tenues. Muchos Ucranianos eran polacos de origen, como en otros tiempos los grandes jugadores como Rubinstein y Janowsky pasaban de ser rusos a polacos por cambios de fronteras políticas. Ahí está tambien Tartakover y muchos otros. La historia ajedrecística polaca es tan rica como la ucraniana y rusa; y a veces tan unida a estas, que es casi imposible separarlas. De ahí que no se puede valorar su desarrollo como inferior a los de esos países vecinos, ni separados de ellos, incluyendo la Prusia Alemana.

Ahora bien, sobre la historia ajedrecística polaca y en especial la relacionada con S.S. Juan Pablo II, hay que irse con cuidado, pues el santo padre no reconoció ninguna de las partidas que se atribuyen a él y mucho menos los problemas que se dicen compuso. Si bien se sabe que jugaba ajedrez, también era conocido que nadie apuntó tales partidas. En varias publicaciones serias de ajedrez se aclaró perfectamente este asunto. En “Larry on Chess” se contestó ampliamente a preguntas sobre la autenticidad de las partidas. Pero surgirán seguramente partidas de S.S. Juan Pablo II como en un tiempo las de Napoleón Bonaparte, que la mayoría de historiadores señala como apócrifas.

A la muerte del polaco más importante del siglo XX, es normal que este hermoso país, Polonia, esté en la mente de muchos. Para los ajedrecistas, sin embargo, poco se conoce de este país con tan rica tradición ajedrecística. En los trabajos sobre la escuela soviética hube de tocar el tema de los ajedrecistas ruso-polacos y este fue uno de los más interesantes con los que tope. La segunda guerra mundial transformó en mucho el panorama de Polonia y poco queda del ambiente del que surgieron Rubinstein y Janowsky; pero siempre se respira algo de aquellos viejos centros ajedrecísticos con tintes judaícos, donde surgieron varios de los mejores grandes maestros judíos. Pero ese es otro tema.

El índice es muy atractivo:

I. Introducción

II. Análisis solitario.

III. Métodos de Resolución.

IV. Ponga a prueba su fantasía.

V. Entrenamiento Psicológico.




En el archivo adjunto, que publicamos exclusivamente en Inforchess Magazine 14 el lector puede ver algunas partes del texto y algunas posiciones analizadas y algunos ejercicios.

Para un entrenador, este libro es invaluable, pues provee de 120 posiciones útiles para hacer una evaluación de un jugador, con una tabla clara de como calificar la evaluación, además de dar algunas guías de hacía que rumbo dirigir los trabajos con determinado pupilo.

El capítulo V es para mi el más interesante, pues no solo aporta información para el desarrollo de un ajedrecista sino para toda persona que desee superarse. La bibliografía recomendada es útil para ajedrecistas y para no ajedrecistas. Las técnicas para superar bloqueos mentales son de gran utilidad práctica y fáciles de poner en acción con resultados inmediatos. Su argumentación expuesta en el libro, hace notoria para cualquiera la importancia fundamental del factor psicológico en el desarrollo de un ajedrecista.

En suma, un excelente libro sobre un tema apasionante.

Notas Bibliograficas Nº 3 Secretos del Juego Posicional Mark Dvorestky

Notas Bibliográficas de Inforchess No.3

Secretos del Juego Posicional.

Autor: Mark Dvorestky

MI Raúl Ocampo Vargas.

Notas Bibliográficas de Inforchess No.3

MI Raúl Ocampo Vargas.

Los libros del gran entrenador MI Mark Dvoretsky siempre serán una adición valiosa para cualquier biblioteca, pero para los lectores de habla hispana las traducciones a nuestro idioma se convierten en imprescindibles. Ediciones Merán de España hizo un gran acierto al publicar “Secretos del Juego Posicional”, tercer libro de los cuatro que componen la obra “Escuela de ajedrez excelente”, (los dos primeros tomos son “Secretos del entrenamiento en ajedrez” y “Secretos de la táctica en ajedrez”); en los que se trata, con el esmerado cuidado que acostumbra Dvoretsky, al juego posicional.

Secretos del Juego Posicional en AjedrezEn su prólogo, Dvoretsky cita a Vasil Iskander que dice: “La Maestría del artista radica en su capacidad de obligar a la razón a actuar al más alto nivel de la intuición. La maestría se nutre de la inspiración y es, en cierto modo, una imitación de ésta. La inspiración puede ser intermitente, en cuyo caso la maestría debe suplir las lagunas.”

Como todos los libros de Dvoretsky, el ahora reseñado nos obliga a pensar profundamente al examinarlo. Los libros de Dvoretsky no se pueden leer, sino que uno se tiene que obligar a estudiarlo. Exigen involucrarnos en él. Como el mismo autor señala: “Mis libros pueden o no gustar, pero es improbable que pudiesen ser distintos”. Por ello son altamente instructivos, son como el ajedrez mismo. Son tan complicados o sencillos como debieran ser. El lo advierte claramente: “Estoy seguro de que cualquier tentativa por modificar o simplificar el material llevaría, inevitablemente a un considerable deterioro de la calidad y a una deformación de los modelos ajedrecísticos generales en la mente del autor”.

Son como debieran ser. Por eso nunca decepcionan. No he encontrado ningún libro, artículo o comentario de Dvoretsky que decepcione. Todos dan una luz inspiradora, alentadora y sobre todo orientadora de lo que es el ajedrez y como comprenderlo.

Lo que más alienta de los textos de Dvoretsky es que siempre puede uno observar a un autor en plena evolución. Cada vez que aparece un nuevo texto de Dvoretsky se observa a un autor que evoluciona. No se conforma con su enorme saber, si no lo pone constantemente bajo una lupa crítica y nos aporta. Pareciera inspirado en la idea de José Martí de que solo hay dos tipos de hombres, los malos que destruyen y los buenos que construyen. Dvoretsky siempre construye. Se construye a si mismo y construye a los que le siguen.

Son sus libros siempre parte de mis libros de cabecera, aunque con lo prolífico que es, obliga a tener un reservorio grande en mi cabecera.

Dvoretsky escribe libros con los que hay que trabajar. El texto que ahora recomiendo requiere laborar con el, al estar constituido por continuas preguntas y ejercicios que impiden una actitud pasiva ante lo escrito. En esto se distingue, afortunadamente, de la mayoría de libros que aparecen hoy día, que fallan en capturar al lector y le permiten acercarse pasivamente a un texto. Aquellos libros no lograrán llevar de la mano a aquel que tiene la ambición de mejorar realmente. Si uno quiere aumentar su acervo bibliográfico con libros que puedan descansar en sus libreros, adornando estantes, no tiene caso adquirir los de Dvoretsky, no son para eso. Los de Dvoretsky se irán maltratando rápidamente, lastimados por el continuo ajetreo, por la constante revisión de sus hojas, manchados por los dedos de lectores que los devoran y los repasan una y otra vez, con el uso constante que los deteriora, cuando una página otrora blanca y pura, se va ensuciando por el descuidado lector que las repasa sin tomar más cuidado en el trato que exprimirlo constantemente. No servirán para adornar nada. Pronto se verán demasiado sucios y agotados, como unos zapatos, que por tan cómodos, el propietario abusa de ponérselos todos los días.

Los libros que tengo de Dvoretsky los he lastimado tanto, que contienen manchas de dedos sucios de tabaco H. Upmann, los he abierto tanto, que las costuras del encuadernador se han aflojado y temo que muy pronto queden hechos una verdadera ruina. Pero los siento sonrientes y satisfechos de darme un gran servicio. Me agradecen seguramente que les pase la mano tan seguido. Se ven feos y hermosos a la vez, con aquella hermosura que da el servicio aunque el físico se haya deteriorado. Su deterioro son como medallas para ellos. Me recuerdan aquellos excombatientes que tienen dañado su cuerpo pero que con su presencia deteriorada le dicen a todos: “Por la Patria fue”.

Mi ejemplar del libro que reseño fue editado apenas en diciembre de 2004 y tengo solo unos meses con él, y sin embargo, pareciera que me ha acompañado muchos años, tan dañado está…

Quisiera haberlo tratado mejor. No haberlo marcado tanto, haberlo cuidado con mayor esmero, no haberlo ensuciado con ceniza de habano, haberme lavado las manos antes de pasar una página y no dejarle la huella que dice: “pertenezco a un fumador empedernido, si así tengo mis páginas, imagínense como él tiene sus pulmones”.

Pero ya es tarde para él. El estudio juntos lo ha maltratado, pero ya lo veo con mucho más cariño que cuando llegó de España tan relumbrante y limpio. Ahora parece un emigrante que ha pasado muchos trabajos, pero que me lo imagino satisfecho por haber cumplido su misión, aunque ello le ha costado perder su buena estampa.

Invito al lector a que conozca a un hermano de él, y que lo maltrate como yo, pero con cariño.

La verdad que los libros de Dvoretsky cada vez están mejor estructurados, realizados con más conciencia pedagógica, con una más depurada técnica de enseñanza.

Es como las nuevas ediciones de los discos de Gardel, que hacen decir “¡Carlitos cada vez canta mejor!”.

El índice es una invitación a adentrarse a temas que capturan, desde que uno lo observa, la ambición de adquirir conocimientos y desarrollar habilidades. Es buen estímulo para desear escuchar en la mente las palabras del autor.

Su primera parte la denomina “El Juego Posicional”, con un capitulado sumamente llamativo:

  • La lógica de la lucha posicional.
  • ¿Qué peón debe avanzarse?
  • Jugadas de ruptura.
  • El bloqueo de los peones pasados.
  • La pareja de alfiles.
  • El cambio inusual.
  • Errores, errores.
  • Ventaja de espacio.
  • ¡Paso a la torre!
  • ¡No se olvide de la profilaxis!
  • Las misteriosas jugadas de torres.
  • Entrenar con grandes maestros.
  • ¿Qué significa “plan estratégico”?
  • Como se traza un plan.
  • Choque de planes.
  • La iniciativa.
  • En busca de la victoria.
  • Una fácil victoria.
  • Ejercicios para análisis.

De esta primera parte, me había propuesto elegir uno para hacer mi extracto del archivo adjunto que publicaremos en Inforchess Magazine 15. Pero la elección fue tan complicada, que para no arriesgarme en elegir mal, me decidí por hacerlo en base al primer capítulo, dejando, de alguna manera, la elección al mismo autor.

La segunda parte, denominada “Posiciones Sencillas” no es menos atractiva:

  • El ataque con un pequeño ejército.
  • Abundancia de posibilidades.
  • Una derrota memorable.
  • Cuando la técnica falla.
  • Equilibrio en la balanza.
  • Táctica en acción.
  • ¡Defensa activa!
  • Incapacidad de asumir la iniciativa.
  • Momentos decisivos.
  • Ejercicios para análisis.

Pocas veces, habrán observado mis más fieles lectores, en las reseñas que realizo de un libro acostumbro poner completo el índice. Pero en ocasiones como ésta, no se puede evitar, pues mi intención es que el lector se sienta motivado para conocer este libro.

Por otra parte, no me queda sino agradecer a la editorial que lo haya encuadernado con la suficiente fortaleza para resistir mi mal trato con mayor entereza que otros textos que, por lo general, requieren, demasiado pronto, los envíe con un encuadernador especial para que los “rearme”, después de pasar buena temporada en sobres para evitar que sus páginas se pierdan por aquí y por allá. Pasó una prueba de calidad muy severa. La de las manchas de tabaco, por otra parte, no las pasa nadie. Ya huele a H. Upmann, lo que me hace tenerle un poco de conmiseración, pero más cariño.

Pueden acceder al primer ejemplo del contenido de nuestro fichero adjunto a través del siguiente enlace: Los conceptos posicionales a través de la explicación detallada de una partida.


Ciudad de México a 5 de agosto de 2005.

Libros Fundamentales para progresar en Ajedrez

El MI Raul Ocampo Vargas publicó en Inforchess una serie de artículos muy recomendables

Les paso el link en Inforches. Esta empresa publicó ( no se si continúa aún) los Inforchess Magazine, donde el Maestro Raul Ocampo hace un extracto de los libros que recomienda.

Wednesday, January 14, 2009

De todo un poco

De Todo un poco

El año 2004 cerró con varios eventos muy interesantes en México. El Carlos Torre in Memoriam, celebrando el centenario del nacimiento del GM Carlos Torre, el match en Cuernavaca, Morelos, entre los juveniles Grandes Maestros Hikari Nakamura y Sergey Karjakin; el Torneo Abierto simultaneo a dicho match y los acostumbrados Torneos FIDE del Club Mercenarios entre lo más relevante. En dichos eventos surgieron, como era de esperarse muchas partidas interesantes.

En el primer archivo de partidas de 2005 para Inforchess Magazine incluyo algunos estudios sobre aperturas un poco extrañas. Por ejemplo 1.e4 d5 2.exd5 Dxd5 3.Cc3 Dd6 y 1.e4 e5 2.Cf3 d6 3.d4 De7!? De factura lituana.
Por supuesto los éxitos de Nakamura no pueden sino estar reflejados, además de 3 partidas de su interesante match con Karjakin, añado algunos de sus éxitos en el Campeonato de Estados Unidos celebrado en San Diego, California.
El archivo es de una veintena de partidas completas y más de 300 partidas citadas, lo que no es poco.

NotiChessVivimos una era de información y el año 2005 se vislumbra como de información muy abundante para los lectores de habla hispana con el surgimiento de NotiChess, producto del inquieto Julio Gonzalez y que seguramente será un hito en el "espacio abierto del ajedrez hispanoamericano".
En México también estará al alcance de los lectores, y como aliciente adicional, los suscriptores mexicanos recibirán un disco con todas las partidas comentadas de la Superfinal del Campeonato de Rusia 2004 con notas teóricas adicionales y todas las partidas que los participantes jugaron en 2004, incluidas sus partidas en la fase eliminatoria de esta magnífica final.
Para esta oferta escribir a
trainerchess@yahoo.com. Esto se ofrece a los lectores mexicanos en disco y a los iberoamericanos en correo email en un archivo zip.

Para 2005 tengo preparadas algunas "cositas" nuevas.

De lo más notable que se observó en los sitios internet dedicados al ajedrez están los nuevos métodos de ajedrez preconizados por entrenadores rusos y ucranianos, como son el "Método de Shashin" y el Método "Stops" de los que hablaré en esta sección.
Con el nuevo año habrá una reprogramación de las secciones, ya que afortunadamente tendremos de nuevo el "Ajiaco" con el buen Carlos Fruvas Garnica (¡still alive!) y nuevos corresponsales desde Ucrania. Las secciones de "Nuevos Rincones" pasarán al cajón de los recuerdos, más no la sección de Nueva Biblioteca, aunque con ciertos cambios. Año Nuevo y nuevos planes y proyectos…

En esta sección abriré una sección de consultas con respuestas seleccionadas entre las que lleguen a trainerchess@yahoo.com , por lo que invito a los lectores a que envíen sus dudas sobre los siguientes temas:

  • Métodos de Estudio y de Entrenamiento en Ajedrez.
  • Psicología y Razonamiento en Ajedrez
  • Consultas teóricas sobre aperturas.
  • Ajedrez Universitario y Escolar.
  • Historia del Ajedrez (principalmente el ajedrez mexicano.)

Las "Riflexiones" continuarán a lo "Zumbado" y en "Ajedrez en México", las crónicas mexicanas de ajedrez.

No me queda por ahora sino desearles ¡un feliz año nuevo 2005 y buen Iré!

"Si me pierdo, busquenme en Andalucia o en Cuba"
Federico García Lorca.

El Entrenador Modelo

El entrenador modelo: Victor Emanuelovich Kart

IM Raúl Ocampo VargasPor MI Raúl Ocampo Vargas.

Un lector muy connotado, el Dr. Jesús Mendoza, quien hiciera su carrera de ingeniero en la ciudad de Lvov, entonces república socialista soviética de Ucrania, me escribió una amable misiva y me pidió escribiera sobre el entrenador número uno de Ucrania: Victor Emanuelovich Kart.

Ya en anteriores artículos he comentado sobre algunos métodos del que fuera entrenador de grandes maestros como Beliavsky, Mikhailchisin, Romanishin e influyera en lo que es hoy una de las escuelas más exitosas del mundo, la ucraniana. Ponomariov, Ivanchuk y Radjabov fueron preparados por entrenadores de la escuela de Kart. Incluso el tío y entrenador de Ponomariov, no hace mucho fallecido, escribió sobre la influencia que sobre él ejerció Kart. También un entrenador muy exitoso en Europa Occidental, el GM Iosiff Dorfman, quien preparó a Bacrot, entre otros, reconoce la fuerte influencia de Kart sobre de él.

Hasta diciembre de 2003 mantuve correspondencia con Victor Kart a través de un amigo mutuo en Hannover, Alemania. Desgraciadamente, tras mandarme algunos archivos, mi amigo dejó de trabajar en el servicio consular de México y ya no conté con su correo, perdiendo el contacto desde esos días con Kart. Pero espero se encuentre bien con su hija en la ciudad de Hannover. No obstante, gracias a las numerosas notas que conseguí a través de mi amigo, creo que puedo dar amplia información sobre su vida, aunque no tan amplia como la de sus métodos, ya que el tema principal de correspondencia era más sobre técnicas de entrenamiento que sobre cuestiones biográficas.

Victor Emanuelovich Kart nace el 19 de Junio de 1929 en el pequeño pueblo de Berdichev, hijo del Dr. Emanuel Kart, médico militar que servía en el cuartel de caballería de aquel pueblo, que poco tiempo después del nacimiento de Kart fue trasladado a diversos establecimientos militares, para finalmente residir en la ciudad de Novosibirsk, en Siberia. De ahí partió al frente en la Segunda Guerra Mundial, por lo que la madre, trabajadora en hospitales militares, se hizo cargo de la familia. Victor trabajo de día y estudió de noche hasta los 14 años. Aprendió a jugar ajedrez a los 12 años, pero el director de su escuela, jugador de ajedrez, lo apoyó en sus primeros pasos, pudiendo Kart foguearse con jugadores relativamente fuertes. Después de 1945 se trasladó la familia, ya completa, a la ciudad de Zhitomir, a 100 kilómetros de Kiev, pero el destino decidió que Kart se trasladará a estudiar a la Universidad de Lvov, a 400 kilómetros de Zhitomir, donde se convertiría en una especie de tesoro patrimonial ajedrecístico. En Zhitomir comenzó su amistad con el futuro entrenador Mikhail Trosman, quien formaría al GM Dorfman y actualmente vive en Estados Unidos y ha entrenado a la famosa Irina Krush. Kart arribó a Lvov ya como campeón juvenil de Zhitomir. Por influencia de Trosman, Kart se acercó a la bibliografía de ajedrez y se convirtió en ferviente coleccionista de libros de ajedrez.

Tras la llegada a Lvov en 1946, se afilió al club de ajedrez de la Universidad. En aquel entonces el campeón de Lvov era Mikhail Romanishin, padre del que sería el GM Oleg Mikhailovich Romanishin, ganador del famoso torneo internacional de Leningrado de 1977 y uno de los grandes jugadores ucranianos, de ascendencia polaca. Estudio Kart historia en la Universidad, pero se dio tiempo para dedicarse fervientemente al estudio del ajedrez. Ganó el campeonato de su universidad y tuvo contacto y amistad con el gran jugador ucraniano, el futuro Gran Maestro Leonid Stein, además de Yuri Simkin y el futuro entrenador Bogdan Vorobts.

La primera influencia para su carrera de entrenador fue el bien conocido autor, jugador y entrenador Aleksey Sokolsky, el campeón de Ucrania de 1947 y 1948 y finalista en el Campeonato de la URSS varias veces. Sokolsky es el autor de un libro, que en forma electrónica, ha publicado inforchess con el título de “Temas Esenciales de la Apertura y el Medio Juego”.

En 1949, Sokolsky escribió un famoso manual llamado “ Aperturas Contemporáneas de Ajedrez”, con apoyo de Kart, Boris Katalymov y Yuri Shabanov. Pero Sokolsky en 1953 fue invitado por el GM Isaac Boleslavsky a trabajar con él a Minsk y Lvov sufrió la pérdida del famoso pedagogo. Cuando Kart termina sus estudios universitarios fue contratado como profesor de historia para las escuelas de la región de Lvov, donde adquiere en su labor una invaluable experiencia pedagógica. Pero más tarde, el Maestro que dirigía la sección de ajedrez del Palacio de Pioneros de Lvov, Rafael Gorenshtein se fue a vivir a Yalta y Kart pudo ocupar su puesto, en la época de que el gran amigo de Kart, Leonid Stein comenzaba su carrera a ser Gran Maestro y campeón de la URSS.

Los manuales de entrenamiento de Sokolsky, dejados a Gorensthein y a los que tuvo acceso Kart , son estudiados y modificados durante años por Kart.

En 1960, el niño Alexander Beliavsky de 7 años entra en contacto con Kart y se une a un grupo con Oleg Romanishin y ellos dos se vuelven las primeras estrellas infantiles con quienes trabaja Kart.

Mikhailchisin dice que hay una fotografía de 1960 en que Leonid Stein, Kart, Romanishin y Beliavsky (de siete años) están analizando partidas. Kart se dedica a estudiar la historia de los sistemas de entrenamiento del ajedrez y saca sus propias conclusiones. Reflexiona sobre el contenido de los cursos y estudia los libros de los entrenadores importantes, como Sokolsky, y de Romanovsky. Se pregunta cual es la clave del porqué a veces los entrenadores no logran los resultados esperados de sus alumnos. Diseña así su propia filosofía como entrenador. Llega a la conclusión que el trabajo debe ser enfocado de manera personalizada, diseñar repertorios de aperturas para cada tipo de personalidad, desarrollar en cada estudiante sistemas para su trabajo independiente y crear una atmosfera amistosa entre sus pupilos. Hace que trabajen en pequeños grupos de amigos inicialmente y él mismo crea una estrecha relación personal con cada uno de ellos. Crea el hábito de que trabajen en parejas, al llegar a la primera categoría. Es decir, grupos de cuatro amigos en tercera y segunda; y al llegar a la primera, los hace trabajar en parejas, estimulando una sana competencia durante el entrenamiento. Cuando trabaja ocasionalmente con grupos, investigan solamente partidas clásicas de forma general, pero ya el análisis fino se realiza profundamente por solo dos jugadores, sólo en pareja. Kart daba importancia fundamental en determinar los puntos débiles y fuertes de sus pupilos, y luego desarrollar los puntos fuertes y establecer por medio de ejercicios, la eliminación de los puntos débiles. Se cita el caso de Martha Litinskaya, que tenía problemas con la realización de la ventaja y hace que ella comience con ese tipo de posiciones a jugar partidas de entrenamiento con fuertes candidatos a maestro y maestros. Hace que utilice el método de prueba y error, extrayendo lecciones de los errores. Dos de sus primeros estudiantes, Ira Rozenweig y Mikhail Burdman se convierten en campeones de escolares de la URSS, pero no alcanzan luego el alto nivel de maestros de la URSS y esto causa que Kart se vuelva más rígido con sus siguientes generaciones. Pero nunca pierde su manera afable y paternal. Muchos de sus posteriores pupilos lo recuerdan firme, pero amoroso, exigente, pero lo ven como un segundo padre.

Después Kart trabaja con el veterano entrenador de la Selección de Ucrania Naum Levin y cuando este emigra a Australia, pasa a dirigir todos los equipos de Ucrania, los que alcanzan bajo su dirección los mayores éxitos, ganan el Campeonato de la Espartaquiada de los Pueblos de la URSS en 1979 y el Campeonato de la URSS por equipos en 1984. En la era soviética, Kart, tuvo tiempo de trabajar en el extranjero, viajando a Birmania y a las Islas de Cabo Verde. Nunca minimizó el trabajo de sus colegas e incluso trabajo con Yuri Sakharov en selecciones de la URSS. Cuando sus pupilos avanzaban más allá de donde los podía ayudar, los canalizaba buscando entrenadores y sparrings del máximo nivel para ellos. Envió a Beliavsky a trabajar con Botvinnik y Boleslasky, y a Romanishin con Tal. En 1976 incluso usaba las partidas de Korchnoi para estudio y mostrárselas a sus alumnos, a pesar de que en esa época Korchnoi era casi ignorado por exilarse de la URSS en ese año. Así sus alumnos estudiaban a los extra clase sin limitaciones.

Desgraciadamente no transmitió a nadie sus secretos, sus pupilos, que luego se volvieron entrenadores, tenían que trabajar basados en la experiencia de haber trabajado con él, ya que sus métodos no los anotó, tenía un odio patológico a escribir. Muchas de sus notas que me llegaron fueron gracias a notas hechas por otros, entre ellos Mikhailchisin y Kravchenko, así como colegas alemanes de su hija Ella.

Cuando Garry Kasparov viajó a Francia al Mundial de Cadetes, Kart fue elegido para acompañarlo y trabajo con efectividad con él. Esa vez el entrenador habitual de Kasparov, Nikitin, no pudo, por razones personales, viajar a Francia. Kasparov después de esa experiencia con Kart, muchas veces decidió trabajar con entrenadores de Lvov, primero con Dorfman y después con Beliavsky; convencido de las bondades de la escuela de Kart.

Como jugador Kart tuvo resultados modestos, dos veces ganó el campeonato de Lvov, en 1953 y 1958. Ya para 1963 dejó de participar en torneos, a la temprana edad de 34 años. Sólo en 1980 jugó en un pequeño torneo internacional en Budapest. Aunque mantenía el hábito de jugar partidas ligeras de entrenamiento con sus alumnos.

Obtuvo todos los honores que se daban a los entrenadores en la URSS, como el título de entrenador emérito de la URSS y de Ucrania. A partir de 1999, emigró a Alemania, a la ciudad de Hannover, a vivir con su hija.

Ahora en Lvov hay una nueva generación de entrenadores y jugadores, como Volokitin y Firman, Ania Muschiuk; mientras que sus alumnos más connotados como Beliavsky, Mikhailchisin y otros, emigraron a Israel, a Estados Unidos, Alemania, Slovenia. Supe que en junio de 2004 celebró con salud su aniversario número 75 y la revista “64” le dedicó un artículo homenaje. Pero hasta donde sé, no se ha creado una escuela de ajedrez en Hannover dirigida por él. Los últimos nueve años en Ucrania no fueron lo maravillosos que cuando era parte de la estructura del ajedrez soviético y tuvo problemas de adaptación.

Es una desgracia que la literatura ajedrecística no tenga un legado de Kart. En la literatura de ajedrez que llega a Occidente sólo Kotov en su libro “Entrene como un Gran Maestro” se le menciona ampliamente. Fuera de Ucrania y la URSS fue poco conocido y sus métodos aún menos. Indudablemente la serie de libros escritos por Beliavsky, Mikhaichisin y Dorfman son el hilo indestructible con que contamos con las enseñanzas de Kart. Las memorias de los congresos de entrenadores de la URSS entre 1965 y 1980 dan referencias de sus discursos y debates en ellos y también muchas de las ponencias preparadas en conjunto con otros entrenadores ucranianos, pero sólo eso queda de la opinión directa de Kart sobre métodos de entrenamiento. Como odiaba escribir, no nos dejo artículos, sino sólo notas transcritas por sus alumnos. Con la diáspora de entrenadores de origen ucraniano, podemos suponer que muchos de ellos han difundido en fragmentos las enseñanzas de Kart. Se puede decir que Alburt y Palatnik tal vez hayan sido influenciados por él, pero certeza tenemos sólo de Beliavsky, Mikhalchisin, Dorfman y Romanishin; el cuarteto de Lvov, que una vez integraron el equipo de la URSS que vino a México en 1977 al Campeonato Mundial Estudiantil. Pocos entrenadores pueden decir que sus alumnos solamente eran la selección de toda la URSS. Como ellos han sido escritores prolíficos, nos consuela saber que de alguna manera las enseñanzas de Kart no se han perdido.

Ciudad de México a 30 de mayo de 2005.

Notas bibliográficas Nº 6

Notas Bibliográficas de Inforchess No. 6

H.O.T. Chess

MI Raúl Ocampo Vargas.

El libro sobre el que quiero llamar la atención del lector “H.O.T. Chess”, por el GM Paul Motwani, es notable por varios aspectos.

Desde hace muchos años el método mnemotécnico de utilizar siglas para ayudarse a recordar pasos a seguir, facetas a considerar, o adjetivos caracterizadores de algún concepto o cosa, ha sido ampliamente usado por pedagogos de diversas épocas, culturas y sociedades.

En las escuelas de administración de los Estados Unidos son de uso común el uso de las siglas y se habla de las “6 S” de Sigma por ejemplo. En las clases de ingeniería y matemáticas de la Academia Naval de los Estados Unidos el “C.A.S.T” fue utilizado desde hace más de siglo medio. Las siglas se utilizan para todo, desde BASIC, hasta ADN, AIDS, sin olvidar el FODA, son de uso común. Incluso en el ajedrez soviético era de uso común entre los entrenadores utilizar siglas como parte de sus programas. En la Escuela Ucraniana actual se publican métodos como el STOPS, del que ampliamente se escribe en su sitio Internet. Los Chinos hablan de las Tres “E” (Espacio, Estructura, Estrategia), como los tres principios básicos de la apertura.

Motwani hace uso extensivo de las siglas y escribe un libro completo. El título de H.O.T. Chess, habla de “Highly Original Thinking Chess” (Razonamiento de ajedrez altamente original). Dedica capítulos a otras siglas como “F.A.C.E.”, “T.O.D.O.”, las cuatro “S”, “C.H.A.M.P.” finalizando con “N.B.”

El Maestro Internacional Basman fue el primero en publicar en el Reino Unido libros de enseñanza de ajedrez utilizando ampliamente siglas como “U.F.O”, para ayudar a recordar a los estudiantes a recordar algunos pasos para evitar errores. Así que Motwani quizás no sea altamente original, pero su libro en lo general si lo es.

En mis diferentes cursos yo he adaptado al español varias series de siglas para facilitar el que mis alumnos recuerden algunos conceptos. En el sitio web del curso de ajedrez “El Juego es Pensar” presente las siglas “OVNI”, “MCABC” y “CAJAS” y en diferentes cursos añado la adaptación de la idea ucraniana de S.T.O.P.S. y la China de las “Tres Es”, así como otras tomadas de diferentes escuelas derivadas de la soviética como la letona, la ucraniana y la bielorrusa, como son “S.E.R.E.” , “C.A.P.A”, y por supuesto algunas de Motwani traducidas al español.

Muchos métodos para estimular la creatividad utilizan siglas, como “TRIZ”, “SCRAMBLER”, “GEA” y cientos de otras. La experiencia general de entrenadores, profesores y coaches es de que la utilización de siglas ha demostrado ser de una eficacia notable y prácticamente se pudiera hacer un libro dedicado solamente a siglas. En algunas revistas universitarias se publican recopilaciones de series de siglas y sus significados, y algunas de esas colecciones contienen varios cientos de ellas.

En su libro publicado por primera vez en 1996, Motwani pone su granito de arena en su creación de siglas, pero en trabajos posteriores lo aumentó y pareciera ser que no habrá límite para ello… El caso es que Motwani los ejemplifica con excelentes partidas y fragmentos, lo que hace de su libro sumamente interesante y digerible. Al lector de habla castellana le costará un poco adaptar sus siglas creadas en inglés al español, como le ha sucedido a los estudiosos de las ciencias administrativas para hacer lo mismo con las numerosas que en inglés se han realizado. Algunos incluso ya no se toman el trabajo y hacen extensivo uso de los términos en su idioma original. Para nosotros es más común hablar de “FIDE” que de su traducción al español que sería “FIDA” o en lugar de “FBI” usar “BFI” o en lugar de “CIA”, “ACI”. En el caso de las siglas en ruso ya es otra cosa, pues de “URSS”, nos costaría trabajo pensar en “SSSR” (o en cirílico “CCCP”). En algunos sitios en castellano a los Maestros Internacionales se les pone IM, en lugar de MI. El caso es que las siglas son útiles y todos somos libres de usar su versión original o la traducción, el caso es que nos sirvan para recordar las cosas. Ya pocos se hacen bolas si se usa “AND” o “DNA”, “SIDA” o “AIDS”.

Como decía antes, el material de Motwani es muy interesante y en el archivo que adjunto que publicamos en Inforchess Magazine nº 16, el lector tendrá una buena muestra de ello.

El GM Motwani es un escritor sumamente ameno y me imagino que las características especiales de sus siglas utilizadas ha causado algún problema a los traductores y haya influido en que, hasta donde yo se, no sea traducido aún al castellano.

Hay veces que palabras se utilizan para recordar o disfrazar siglas, así como los Beatles utilizaron Lucy Skies on Diamond, para decir LSD, la famosa droga, o los mafiosos dicen “Angel King”, para hablar del AK, conocido en México como “Cuernos de Chivo”, que no es otro que el AK 47, que debe su nombre a Alexander Kalashnikov.

En una revista de historia militar norteamericana en cada número aparecen siglas utilizadas en varias guerras históricas, e incluso muchos nombres oficiales de unidades como SWAT, SEALS, SAMS; o sistemas como TRADOC, son tan de uso común, como que poco se tiene que decir que significa “W.C”.

El caso es que todos juegan con las siglas. En organizaciones respetables como “ISSSTE” (Instituto de Seguridad Social al Servicio de Trabajadores del Estado) se interpretan en broma como “Inútil Solicitar Servicio, Sólo Tramitamos Entierros”. En ajedrez GMI, MI, MF, GMIF, MIF, MFF, casi no necesitan explicación, aunque algunos utilicen títulos como EGM que significa “Enemigo Gratuito del Metro”. En México cargamos los ajedrecistas con el SICED, el SAT y el I.V.A. y otras siglas que nos ponen R.I.P. A los políticos les encanta que se les nombre con sus siglas, como JFK, AMLO, RMP, MAD, VFQ o CSG. Y así al infinito…Los aeropuertos también han necesitado el uso de siglas y si uno no sabe que es LAX, HVA, DCA o MRD, puede tener graves problemas.

En las referencias ajedrecísticas es útil saber que BCE, es el Basic Chess Endings de Fine, que ECO, es la Enciclopedia de Aperturas, que ELO, no son siglas sino el apellido del Dr. Arpad Elo; que NIC, es New in Chess, que CBM es el Chess Base Magazine, que IM, es Inforchess Magazine, que YB es el Yearbook del NIC, SS es Sistema Suizo, etc.

Las siglas han llegado para quedarse y son de gran utilidad para estudiar ajedrez y el “H.O.T. Chess” es un libro altamente recomendable. Después, tal vez hablemos de otro interesante libro de Motwani, “C.O.O.L. Chess”, pero espero no tener que referirme luego a mis notas bibliográficas como diciendo “ en la NBI número 5, hable de la Escuela China” o “en IM 1, pueden ver unas acotaciones al ECO como parte de mis RFL (Riflexiones) número 4” Ya que algunas siglas se olvidan y ya no nadie sabe que significa la “H” del nombre de “H. Zumbado”. Una vez leí que la “S” de Harry S. Truman, no significaba sino “S” y no otro nombre… Por cierto, este artículo lo inicie en la Cuatro H. Ciudad de Veracruz (cuatro veces heroica) aunque ya nadie le dice la H.H.H.H. Veracruz, como alguien a veces le ponía en sus escritos.

Ciudad de México a 25 de enero de 2006.